La Guerra de la Financiación. Episodio III, Cap. 4: Usa la Fuerza

La Guerra de la Financiación. Episodio III, Cap. 4: Usa la Fuerza

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La Guerra de la Financiación. Episodio III, Cap. 4: Usa la Fuerza

 

En realidad quiero decir: si quieres conseguir financiación, vende la profesionalidad de tu gestión. Creo que el espectador medio se pasa media película de Star Wars preguntándose qué es eso de la Fuerza. Esta es una buena definición: la Fuerza es lo que le da al Jedi su poder, está dentro de ellos e interactúa en toda la galaxia.

Tiene un parecido razonable con la profesionalidad en la gestión de la empresa: es lo que une a los distintos departamentos, permite avanzar, explorar nuevos mercados…

Cuando explico públicamente este consejo suelo preguntar a la audiencia: “¿Quién de los aquí presentes se cree un mal profesional?”. Nadie ha levantado la mano nunca. Estoy seguro de que no es por vergüenza, les veo la cara: es por autoestima.

Demuestra fuerza y prudencia

Mi padre me solía decir que las cosas hay que demostrarlas para que te crean, con la profesionalidad pasa lo mismo, nadie regala nada. Demuéstrale al banco tu visión estratégica, el saber hacer las cosas y  tener los pies en el suelo.

La imagen de las personas que están detrás de la empresa en un factor fundamental. Todos los bancos tenemos personas vetadas por malas experiencias y personas en las que se confía muchísimo debido a lo que han demostrado con los años.

Otra virtud muy valorada en la banca sobre la gestión de las empresas es la prudencia. Se prudente, el banco lo es, por ejemplo, no vayas con crecimiento de negocio exponenciales, no se los va a creer. La banca está llena de personas prudentes, es parte de su ADN, empatiza con ellos.

Busca ejemplos de actuaciones que refuercen tu profesionalidad, casos concretos, por ejemplo, cómo afrontasteis una crisis, qué estrategia teníais, cómo se llevó a cabo, qué resultados obtuvisteis. Apaláncate en el pasado para reforzar tus planes de futuro, esto te dará credibilidad.

Busca tu banco

Analiza tu estilo y cultura de empresa y busca bancos afines. Por ejemplo, si en tu discurso y misión hablas de personas, busca y encuentra un banco con lado humano, que dé valor a este aspecto. Te va a entender mucho mejor que si vas al tiburón financiero que te da unas buenas condiciones pero te muerde en cuanto puede porque es parte de su ADN. Aunque lo parezcan, no todos los bancos son iguales.

Las personas son las que se relacionan, busca personas en los bancos que te entiendan, conviértelos en los embajadores de tu empresa.

Si lo consigues, la fuerza te acompañará siempre.En el próximo capítulo: diversifica y selecciona bien. Trabaja con más de un banco.


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