Catalunya y el empleo cooperativo

Catalunya es un territorio con larga tradición en empleo cooperativo que se remonta a mediados del siglo XIX. La coyuntura económica de los últimos años ha sido un nuevo acicate para generar nuevas cooperativas, que desde el 2008 se crean al ritmo de un centenar al año, una barrera superada en 2012, con 130 nuevas sociedades.

La cultura social y el empuje emprendedor del cooperativismo en Catalunya se refleja en cerca de las más de 38.000 personas que trabajan directamente con este modelo societario, a través de 4.779 cooperativas. El cooperativismo catalán representa el 22% del estatal y el 14 por ciento del empleo cooperativo español. Además, supone el 3,5 por ciento del PIB catalán, según datos de la Confederació de Cooperatives de Catalunya (Coopcat).

Crecimiento a pesar de la crisis

Las cooperativas se están revelando como un modelo empresarial en auge en tiempos de crisis, tanto para negocios de nueva creación, como en caso de sociedades limitadas que se transforman, como en proyectos de empresas abocadas al cierre que están salvando sus trabajadores.

Joan Segarra, director del área de sociedades de iniciativa social de la Federación de Cooperativas de Trabajo de Catalunya, destaca que, a pesar de la crisis, el cooperativismo como fórmula empresarial sigue creciendo. En el 2012 se crearon 130 cooperativas nuevas en Cataluña, lo que supone un incremento de un 11 % respecto del ejercicio anterior y de un 30% en relación al año 2008.

El presidente de la Federación de Cooperativas de Trabajo de Cataluña, Perfecto Alonso, destaca que incluso perfiles que antes eran autónomos se están constituyendo en cooperativas, aunque sean pequeñas. “El autónomo es la estructura más débil del mundo empresarial; en cambio, si se constituyen en cooperativa tres o cuatro autónomos, pueden ser mucho más fuertes”.

Las claves de la competitividad

Para el director general de Economía Social y Cooperativa de la Generalitat, Xavier López, las cooperativas tienen los elementos clave de la competitividad:

• Flexibilidad. “Por su autogestión, tanto interna como hacia sus grupos de interés, clientes, proveedores, etcétera”.
• Transparencia, participación y democracia. “Facilitiando implicar a sus empleados al sentir los socios de la cooperativa suyo el proyecto”.
• Innovación y cooperación. “No es un modelo obsoleto sino de futuro”.

Ivan Miró, investigador en materia de cooperativismo catalán y coautor del libro “Las cooperativas obreras en Sants (1870-1939)”, también defiende la validez de la economía cooperativa. “Con más de un 20% de paro y el retroceso del Estado de bienestar, surge de nuevo la necesidad de colaborar”.

[caption id="attachment_2320" align="aligncenter" width="504"] Estadísticas de las cooperativas catalanas. Gráfico: Confederació de Cooperatives de Catalunya (Coopcat).[/caption]