Economía colaborativa: confianza y reputación para un modelo productivo entre iguales

Economía colaborativa: confianza y reputación para un modelo productivo entre iguales

2 min.

Economía colaborativa: confianza y reputación para un modelo productivo entre iguales

A nadie asombra ya que desconocidos compartan un vehículo (carsharing); que profesionales de diferentes empresas trabajen en un único espacio de trabajo (coworking) o bien, que familias intercambien su vivienda para pasar las vacaciones. Son formas de consumo colaborativo que han ido ganando espacio en nuestra sociedad al hilo de las tecnologías de la Información, la situación económica y la conciencia cívica.

laboral kutxa economía colaborativaUna tendencia que se enmarca dentro del concepto más amplio de economía colaborativa y que podría definirse como la estandarización de nuevos patrones de consumo que favorecen el uso frente a la propiedad, son las nuevas formas de producción entre iguales (peer-to-peer). Nuevas relaciones de confianza basadas en el uso común, las redes sociales y la proximidad, y nuevas fórmulas de participación para financiar proyectos.

Por tanto, no se trata de relaciones personales y de gestos altruistas. Hablamos de un modo distinto de concebir las relaciones económicas, en el que se comparte para optimizar recursos y en el que la confianza y la reputación son ejes centrales. Un modelo nacido entre particulares pero que está llegando al mundo de la empresa y las finanzas.

Así, además de compartir vehículo, casa o espacio de trabajo, ya es posible compartir conocimiento en la red (Creative Commons), generar creación productiva en los llamados fablabs, acceder a un préstamo con el solo aval de la reputación del solicitante, o participar en financiación colaborativa para apoyar el emprendimiento.

Estas tendencias tienen como denominador común la eliminación de intermediarios en la creación o la prestación de las transacciones, transfiriendo el poder de la empresa al cliente-ciudadano, lo que obligará a las empresas tradicionales a revisar su modelo de negocio.

Proximidad y desarrollo regional

Proximidad y desarrollo regional son las claves en el nuevo modelo, para la creación de cada vez más empresas de base colaborativa. Un reciente artículo publicado en Le Huffington Post desgranaba las cuatro herramientas necesarias para implementarlo:

  • Crear una base de conocimientos para compartir las prácticas, modelos de organización, sistemas de gobierno, o los nuevos modelos de negocio colaborativo generados. Este conocimiento debe volcarse en una plataforma colectiva, abierta y constituyente de un bien común, útil para todos.
  • Crear incubadoras para emprendedores colaborativos.Estos empresarios necesitan una incubadora atípica que les permita inventar un nuevo género de modelos de negocio (gestión de plataformas de servicios entre iguales, funcionamiento en código abierto, incentivación de sistemas de aceptación, uso de redes sociales).
  • Facilitar espacios propicios para la colaboración y el intercambio. Las plataformas online no son suficientes, pues los ciudadanos-empresarios necesitan lugares para reunirse, trabajar juntos, o simplemente salir de los tradicionales espacios de trabajo. Espacios de coworking, fablabs…
  • Desarrollar el uso de plataformas de financiación participativa.La financiación participativa da a conocer y congrega a las comunidades de confianza.


¿Cuál es tu reacción?